Dalszöveg
En la cocina, brillo el fregadero,
Con la esponja, limpio el acero.
El jabón espuma con intensidad,
Dejo los platos en su claridad.
En la sala, barro el suelo,
Con la escoba, todo está de modelo.
El aspirador recoge el polvo,
En cada rincón, trabajo resuelvo.
En el baño, uso el desinfectante,
El lavabo queda brillante.
Con el trapo, limpio el espejo,
Todo reluce, parece un reflejo.
La ropa sucia va a la lavadora,
Con el detergente, queda encantadora.
Después en la secadora gira sin parar,
Y con la plancha, empieza a brillar.
En el jardín, recojo hojas,
Con el rastrillo, las dejo hermosas.
El cubierto de basura lleno está,
Pero reciclar es una buena verdad.
La casa limpia me hace feliz,
Es mi hogar, mi lugar de raíz.
Con cada tarea, lo dejo especial,
Porque el orden siempre es vital.