Hay que amar cuando la incertidumbre está de fiesta cuando la belleza descansa dentro del corazón cuando la esperanza no es una apuesta cuando sentimos en el otro la bondad de la Creación Hay que amar para recordar el lenguaje del Cielo para darle a la tierra mil sueños para no servirle a la Nada en su vuelo para sentir el Universo sin dueños Hay que amar con el silencio libre de penas con las palabras de nuestra piel con todo el verbo que hay en las venas con la existencia sabor a miel Hay que amar en las fronteras de lo imposible y la locura en los hogares de anhelos artesanales en las vías de fuego que inflama la ternura en los espacios de luz de los finales Hay que amar el aquí y el ahora como forma sensata de estar en el infinito y la eternidad