Quién lo iba a decir, ya un año después, de aquel beso dudoso, pero muy cariñoso. Tú me has hecho creer, lo que era impensable, tantas dudas y miedos, todas ellas en balde. Ya no quiero otra cosa, que perderme en tus ojos, despertar a tu lado, tus besos calurosos. Todo es mucho mejor, juntos vamos luchando, entre risas y amor, nos vamos encontrando. Y ahora un año después, acepto mi derrota, he caído en tus brazos, cómo una niña idiota. Ya no quiero otra cosa, que perderme en tus ojos, despertar a tu lado, tus besos calurosos.