Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme;Has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo,Y todos mis caminos te son conocidos. Pues aún no está la palabra en mi lengua,Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda. Detrás y delante me rodeaste,Y sobre mí pusiste tu mano. Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí; Alto es, no lo puedo comprender