เนื้อเพลง
Un día yo estaba en una cama acostado, tieso y con pocas ilusiones de la vida futura, cuando aparece en mi lecho de tortura, un mensaje inesperado, venía de una chica que en Girón conocía con rostro de picardía delgada pero con ojos de interés y de avidez por aprender demasiado! Esa chica era Anayda, quien me invitaba a incluirme en un chat de compañeros que yo no reconocía porque los años pasados traicionaban a mi memoria y en medio de mis dolores, aprendí que el tiempo no importa cuando una amistad te invita a levantarte a mejorarte y a curarte y como ángel de la guarda, te enseña a volver vivir te enseña a volver a amar.