Quetzal

Verso 1:
Es la música, que viaja sin final,
Desde el origen hasta el más allá.
Vibra en el alma, atraviesa el tiempo,
Un lenguaje eterno, que nace en el silencio.
Es la música, el hilo universal,
Que une el pasado, presente y lo espiritual.
Coro:
Nació del silencio, nació de la reflexión,
De la ondulación del cerebro, de mi alma y de mi corazón.
Todo este mundo... abundante y color celestial,
Como las plumas del quetzal, libres en su vuelo inmortal.
Es un eco en el viento, un susurro de eternidad,
Melodía que danza, desafiando la realidad.
Verso 2:
Cada nota que toco, es un puente a otro lugar,
Se entrelazan los tiempos, no hay distancia ni lugar.
Desde lo profundo del ser, al espacio sideral,
Una sinfonía sin fin, que no se puede callar.
Cada ritmo lleva vida, cada acorde, una emoción,
Que atraviesa la barrera del sonido y la razón.
Puente:
Y cuando el tiempo se detiene, la música sigue en pie,
Es un río que fluye, que jamás se deja vencer.
Cada compás es un latido, en este cosmos de vibración,
La música es el universo, es mi única oración.
Coro (Repetición para cerrar):
Nació del silencio, nació de la reflexión,
De la ondulación del cerebro, de mi alma y de mi corazón.
Todo este mundo... abundante y color celestial,
Como las plumas del quetzal, libres en su vuelo inmortal.
Es un eco en el viento, un susurro de eternidad,
Melodía que danza, desafiando la realidad.