Cuando los veo llegar pienso en el timbre que pronto va a sonar y sin darme cuenta rin rin rin suena fuerte sin parar. Esta es la señal que todos esperamos para irnos a formar. Que divertido será, conocernos y jugar. Una vez en la sala los profesores nos explotan sin parar pero sabemos que con su ayuda y orientación lo vamos a lograr. Todos somos diferentes algunos son como el azúcar y otros como la sal Pero cuando nos unimos nada ni nadie nos puede separar. Así son mis compañeros de colegio variados y solidarios que si necesito una mano o que me ayuden a levantar con ellos puedo contar.