Hoy dejamos huellas en este instituto Con risas y sueños en cada mañana Aunque hoy nos separemos no es un adiós, los recuerdos viven en cada rincón. No es un adiós, es hasta luego llevamos en el alma a cada amigo y su fuego. Gracias Brassavola, por cada paso, por cada recuerdo, en este abrazo. Me llevo en el alma todo tu calor, porque en ti aprendi a ser quien soy. A mis maestros y amigos fieles gracias por ser parte de mis pinceles. La despedida duele y aunque nos separe la distancia siempre llevaremos en el corazón al gran Brasavola, donde aprendimos y donde siempre seremos amigos.