歌詞
Hoy miro hacia atrás y veo los días,
en los pasillos, tantas sonrisas,
las voces amigas, los sueños por cumplir,
y cada rincón que me vio aquí vivir.
Juntos aprendimos, juntos nos caímos,
con cada lección, más fuertes nos hicimos.
A los maestros, a los amigos fieles,
gracias por ser parte de mis pinceles.
Gracias, Brasavola, por cada paso,
por cada recuerdo, en este abrazo.
Me llevo en el alma todo tu calor,
porque en ti aprendí a ser quien soy.
Hoy partimos, pero no es el final,
porque en cada uno hay un pedacito igual.
Tu enseñanza es el eco que llevamos,
y en cada sendero, juntos caminamos.
Los años pasaron como el viento,
pero el cariño es eterno en el tiempo.
Desde lejos, siempre regresaré,
a esas aulas que tanto enseñaron a ver.
Gracias, Brasavola, por cada paso,
por cada recuerdo, en este abrazo.
Me llevo en el alma todo tu calor,
porque en ti aprendí a ser quien soy.
A mis amigos, a los maestros también,
gracias por ser el alma de este edén.
La despedida duele, pero es señal
de que este capítulo fue especial.
Aunque nos separe la distancia y el sol,
siempre llevaremos en el corazón
al gran Brasavola, donde aprendimos,
y donde siempre seremos amigos.