Tomo el auto y comienza la aventura, buscando lugares donde la luz del sol se funde con tus ojos oscuros que me miran, mientras las montañas esconden mis ganas de tocarte, y sigo fingiendo que no busco nada, aunque por dentro muero por besar tus labios, consultas de este corazón. Me pierdo en el tiempo, las nubes son mis calles, y las horas corren veloces cuando me dejas beber de tus besos inolvidables, ocultos en la noche para que el momento no sea la envidia de aquellos que desearían estar en el paraíso de tus brazos. Mi niña de ojos oscuros, buscas iluminar el camino de alguien perdido en tu cintura, rompiendo lo correcto, mientras esperamos dar el último paso, hasta que el reloj marque las diez y todo tenga que terminar. Te esperaré, hasta que la luna pase y pueda volver a estar junto a ti, en el olvido de nuestros sueños.