En una noche de fiesta Allí estaba solitaria Porque dios allí la puso A esperar por mi llegada. Y enseguida yo la vi Entre tantas caras raras Y enseguida me prendí De sus colores y el alma. Vestido azul, piel blanca. Esmeralda por sus ojos Valentía en su actitud Inocencia en su mirada Yme entrego su tiempo Sin pensar que era su vida Ahora los hijos se fueron Más los tengo en su mirada Oh, dios, cuídala por mi Si algún día le faltara. Y si algún día la llamaras Es a mi a quien tomaras Oh, Oh, es a mi quien llevaras.